Me despierto a las 3 y media de la madrugada porque me quedé dormida tipo 1
tengo el horario cambiado y me da un poco de miedo. mira si se me altera algo del organismo?
Me miro todas las ultimas noticias de vanucci
nunca generé empatía con vanucci pero justo está hablando de que el padre le decía puta cuando tenía 10 años y entonces me da pena la vanucci niña.
no la vanucci adulta, claro
bah ni idea, estoy medio dormida y salto a videos de monica listorti en el bailando
listorti le reclama que no está tanto en la casa
salto a videos del bailando 2016 y la mujer de luciano castro le parece injusto que no la hagan bailar proque tiene 2 hijos
me sale cero empatía. cero
hoy tengo la moral dada vuelta
tengo un mensaje sin leer de watsap. una amiga. me dice que no sabe si salir el viernes con un pibe que le gusta porque el pibe tiene novia y todas las amigas la condenan: "defendé al genero, boluda, media pila" le dijo una chabona del laburo.
yo le escribo BOLUDA, DEJATE DE JODER LA VIDA ES UNA SOLA
no se donde quedo la moral hoy, realmente
tengo el archivo "roommates" y "los normales" abiertos. no se si fusionarlos o hacerlos dos textos distintos
las 5 la puta madre, cuando me voy a dormir
me como media canastita caprese que me traje de lo de mi vieja
y releo un cacho de roommates:
"Es Jueves. Pasan dos meses desde que cogimos la primera vez, o sea desde que salimos.
Durante la semana dormimos mitad en mi estudio, y mitad en la casa de
Juan, con sus padres en el cuarto de al lado, pero hacemos tiempo en Romario hasta
que cierra y llegamos siempre tipo 2 cuando ya se acostaron.
En la semana no
voy ni un solo dia a mi casa, no soporto tener a mis padres de roommates. Me
deprimo, no puedo.
Los fines de semana nos vamos al consultorio de su padre, porque en mi
estudio se queda la madre de Lola.
Somos gitanos pero quiero estar con él todo el tiempo, y que cojamos. No
me importa que tenga que ser en silencio.
No me veo con ningún amigo, ni amiga, no laburo, no hago nada en todo
este tiempo. No voy a recitales del indie con las cools ni salgo con mis amigos
de Floresta. Nada.
Sólo me cruzo a Lola en el estudio, un poco, porque cuando me despierto ella
ya hace horas que está trabajando. No me entra ni un solo peso en estos meses.
Seba me escribe y no le respondo. No le respondo a ningún amigo ni amiga
La guita se me va en el alquiler del estudio, papas fritas de paquete, halls
cream y tampones.
Me alimento como el orto, y no me importa.
Me duele todo porque en el consultorio del padre dormimos en la
alfombra, en una pseudocama que arma Juan con almohadones.
Lo único que quiero es estar con él todo el día, todos los días de mi vida.
No me importa que no me entre ningún laburo. De hecho, mejor, sino voy a
tener que trabajar y no voy a poder estar con él.
Voy a casa, mi madre me pregunta si estoy bien y le digo que sí, que
estoy perfecta
Yo se que esto no es normal. Pero todo el tiempo tengo miedo de perderlo.
ODIO La pérdida, como concepto. LA ODIO.
Igual sé que si tengo miedo de perderlo, la cago, porque lo voy a terminar
perdiendo, por eso de que si pensás mucho algo se te cumple, entonces trato de
pensar en positivo pero todo en mi mente es apocalíptico.
Si me deja, no voy a poder vivir sin él. Nunca. Ni sé cómo hice para
vivir sin él antes de conocerlo. Antes de Juan no hubo nadie. Punto. Rolando y
Ernesto las pelotas.
Viernes. Decimos de vernos después de terapia.
Amanezco en el estudio porque Juan se fue antes de dormirse, a las 10 de
la mañana.
Duermo de 10 a
14.
Llego. Mi psicóloga me abre y me mira de arriba abajo: “¡Ah bueno! ¡Te
re produjiste!”
Qué se yo, tampoco los tacos y el vestido negro son una gran producción.
Igual me siento insegura en tacos altos.
“Si, que sé yo, hoy veo a Juan y quise ser un poco más femenina”
Me siento y le hablo de la guita. Lloro, le digo que no me entra ningún
laburo y que no se qué hacer.
“Claro, te sentís desprotegida y desamparada, no?”
“Sí, no. No se. Quiero guita”
“Rober, acá el tema es otro, si vos te parás en la falta, sentís
desamparo y desprotección. Pero si sentís eso, es que esa sensación ya estaba,
es anterior”
De golpe me llega un mensaje de texto. Miro y es un mensaje de Juan
“Discutí con mi familia. Voy a estar todo el finde adentro. Hablemos el
lunes”
¿¡QUÉ?!? ¡¿¡HABLEMOS EL LUNES?!?
Lo odio, pero al toque la furia se transforma en depresión.
Mal, me quiero matar.
Lloro.
Mi psicóloga me dice “¿Querés que hablemos del tema?”
No, no quiero porque a esta yegua le encanta dar consejos de revistas
femeninas y me va a decir que le dio fobia o que “para muestra hace falta un
botón” como dice siempre y entonces el subtexto va a ser que lo tengo que
dejar a Juan inmediatamente antes de que él me deje a mi porque me va a hacer
sufrir. Es obvio.
“No creo que me esté
mintiendo, capaz discutió en serio, que sé yo capaz quiere estar solo”
“Mira,no es una manera amorosa de querer estar solo. Hay maneras y
maneras, y ESTO que acaba de hacer es completamente desamparante”
“Pero pará… ¿No es que si siento desamparo, EL DESAMPARO ES ANTERIOR? O
sea que la cupla no es de Juan!….VES QUE SOS INCONGRUENTE?”
“¿Quién es el incongruente, Robertita?”
Lloro todo el resto de la sesión.
Llego a casa, porque como es viernes no puedo volver al estudio.
Mi vieja me ve vestida así y me dice “Ay que linda, adónde vas?”
No le respondo y subo a mi pieza
No como, no tomo mate, hago zaaping.
Le mando tres mensajes de texto. Uno a las siete, uno a las ocho y media
y uno a las nueve y cuarentaycinco.
Me llama a las doce de la noche.
Cortante, me dice que está mal que discutió con la familia, que no quiere
entrar en detalles, que mañana hablamos.
Sufro un montón pero a todo le digo “Ok, quedate tranqui”
Paso todo el fin de semana encerrada en mi cuarto.
No puedo entender en qué momento Los normales era mi proyecto de novela corta, por fin una novela corta, y de nuevo tengo 180 paginas de word la cocha de mi madre
Cierro todo y abro el guion de Loser Serie
Algo voy a hacer con Loser Serie.
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